La salmonicultura (industria del salmón) se introduce en Chiloé entre los años 1921 y 1973, y su impacto no tardó en notarse. Con la llegada de esta industria, se comenzó a generar un proceso de cambios a niveles económicos, socioculturales y ecológicos. La llegada de trabajadores desde el continente, con otras costumbres y visiones, para algunos expertos, fue la introducción del neoliberalismo a la isla y el punto de partida de un cambio cultural y una crisis ambiental.
En términos de pesca, Chile es un gran exportador de recursos y la zona sur-austral es su mina más preciada. El producto estrella es el salmón que, sumando todas sus variedades, representa más del 50% de las exportaciones nacionales. Si nos centramos en la Región de Los Lagos, estas industrias son aún más importantes, ya que son una parte fundamental de la actividad económica regional, generando una alta ocupación laboral.
58,7%

El salmón es el segundo producto más exportado del país luego del cobre.

Chile es el segundo productor de salmón en el mundo, detrás de Noruega.
¿Cómo contaminan las salmoneras?
La constante incorporación de nutrientes en las aguas, para el óptimo crecimiento de estos peces, ha provocado un grave daño en el medioambiente. Algunos agentes contaminantes son los pesticidas y antibióticos que se les da a los salmones que, según datos de Greenpeace Chile, en ocasiones, superan en un 6.000% a los utilizados en países europeos. También, entran en esta categoría los colorantes utilizados y los químicos para combatir el piojo del salmón.
Todo lo mencionado dan las condiciones perfectas para una posible generación de marea roja, algo que ya ha pasado en el archipiélago de Chiloé y por culpa del actuar humano.
La salmonicultura devasta el fondo submarino. Todos los agentes contaminantes mencionados en “las aguas” llegan al fondo submarino y generan una contaminación que, en el caso de los lagos, puede tardar hasta cien años en repararse. Además, el suelo marino es duramente golpeado por la propia comida y feca de los salmones, que se acumula en un solo lugar.
En los últimos años se ha hecho común los escapes masivos de salmones en los centros de cultivos, algo extremadamente grave para la fauna cercana. Hay que tener en cuenta que el salmón es un pez introducido en nuestros mares y su presencia no controlada puede provocar graves daños. El salmón es un importante depredador de otras especies y su “suciedad”, incluso, puede afectar a cetáceos que transiten por la zona.
Fuentes: CIPER Chile, Alejandro Pérez (UC), SalmónChile.
¿Fomentará el Puente Chacao el extractivismo?
Actualmente, la legislación chilena permite, promueve y protege la libre competencia a través del Decreto de Ley Nº211, promulgado 1973 y actualizado en diversas ocasiones. Es decir, si una empresa quiere instalarse en Chiloé y cumple con todas las medidas impuestas por la ley, no tendrán problemas en posicionarse dentro de la isla y comenzar a trabajar.